El 4 de noviembre de 2023 volvemos a manifestarnos en Morón un grupo de colectivos, movimientos sociales, sindicatos y partidos políticos con el objetivo de lanzar a la ciudadanía varios mensajes de gran trascendencia
4/11/2023
11.00h
Salida desde la Plaza de San Miguel
El 4 de noviembre de 2023 volvemos a manifestarnos en Morón un grupo de colectivos, movimientos sociales, sindicatos y partidos políticos con el objetivo de lanzar a la ciudadanía varios mensajes de gran trascendencia
Debemos hacer un ejercicio de memoria histórica y recordar que las bases hispano-norteamericanas surgen de los pactos franquistas de 1953 con EEUU. Desde entonces, la situación de dependencia respecto al gran imperio militar desde la segunda mitad del siglo XX no ha variado, pero se quiere hacernos olvidar hechos como la presencia de submarinos nucleares en Andalucía, como el desastre nuclear de Palomares, los vuelos desde Rota a la base de Guantánamo, o la intervención de Rota y Morón en conflictos donde se dieron graves crímenes de guerra de la OTAN (la ex-Yugoslavia, las dos Guerras del Golfo, bombardeos en Libia con la posterior guerra civil en este país, Guerra de Afganistán, etc.) Los distintos gobiernos españoles han pactado la llegada de más destructores, más aviones, más tropas de EEUU, incumpliendo la condición de modificar el convenio bilateral entre ambos países y las condiciones aprobadas en el referéndum sobre la OTAN.
El movimiento pacifista y el movimiento antimilitarista andaluz tienen que recurrir al pensamiento crítico y cuestionar las “verdades” oficiales. Andalucía sigue estando a la cola de Europa en muchos aspectos, y su situación de dependencia y falta de soberanía no la van a solucionar las viejas promesas de enriquecimiento gracias a su servidumbre militar, claramente visible en las bases militares. Esta servidumbre militar que sufre toda Andalucía, que la convierte en objetivo militar en cualquier conflicto bélico de la potencia norteamericana, se pretende comprar con limosnas.
El binomio Rota-Morón se nos presenta como esencial para la estrategia española, para lo que llaman “seguridad atlántica” y “seguridad europea”, pero jamás se explica a la ciudadanía todas sus implicaciones políticas y sociales, económicas, culturales o estratégicas para nuestra tierra. Es indudable el esfuerzo por militarizar las conciencias, desde la intromisión de lo militar en el campo educativo, desde los medios de comunicación dominantes, mientras crece la presencia de discursos militaristas en el estado español, que no cesa de aumentar su gasto militar, que para este año asciende a más de 31 mil millones de euros (según estudios del Centro Delàs), un significativo incremento, mientras se siguen sufriendo grandes recortes en ámbitos como la sanidad, la educación, los servicios sociales o la defensa del Medioambiente.
La dependencia de Andalucía respecto a una economía militarizada se sustenta en la falta de alternativas económicas, mientras se sufren situaciones como el enorme paro, sobre todo el juvenil, la emigración hacia otros territorios y otros países, los graves problemas medioambientales a los que no se busca solución… Situaciones que no van a solucionar bases como las de Rota, Morón, Viator o Córdoba. No se trata de dinamizadores económicos, sino de factores de riesgo para la población andaluza, que no debe ser esclava del gran negocio de las armas y la muerte.
La conocida como “Base de Morón” afecta además a poblaciones como Arahal, El Coronil, Utrera, Carmona o Los Molares. Alberga distintos escuadrones aéreos, y forma parte del AFRICOM, responsable de las operaciones militares de EEUU en relación con las naciones del continente africano, un continente que sufre múltiples conflictos bélicos muy ligados al pasado colonial y a la dominación de las grandes potencias europeas, y que al mismo tiempo sufre un neocolonialismo ligado a cúpulas militares que casi siempre actúan al dictado de las potencias del Norte.
Consideramos una actitud suicida creer que las guerras solucionan los conflictos. Como defensores y defensoras de la construcción de una verdadera Cultura de Paz tanto en el ámbito educativo como en la sociedad en general, expresamos nuestra firme oposición a todas las formas de militarización, como la intromisión militar en la vida política y social de un país de manera impropia, o el pensamiento que defiende que lo militar tiene que tener un peso excesivo en la vida de un país.
Denunciamos que la Guerra empieza aquí, en el gran negocio del comercio de armamentos, en las industrias militares, con la Banca que las financia, y en las bases militares. Exigimos un cambio de rumbo en las prioridades de inversión y llamamos a construir un mundo sostenible y pacífico para las generaciones presentes y futuras. Instamos a las autoridades a reevaluar sus prioridades de inversión y a destinar los recursos necesarios para satisfacer las necesidades reales de la sociedad en su conjunto y sus derechos socioeconómicos (un ejemplo de ello sería el nuevo hospital de Morón). Ese debería ser el objetivo de una verdadera “defensa”.
No queremos acabar sin hacer mención de Adrián Collado Elías, recientemente desaparecido, y recordar a todas las personas que en Andalucía han dedicado y dedican su vida a distintas formas de Insumisión a las guerras, a trabajar contra la guerra y por la paz.
Tampoco podemos acabar sin exigir Justicia internacional para solucionar conflictos enquistados desde hace décadas como la ocupación de Palestina por Israel, la del Sahara por Marruecos, o los conflictos del Sahel y de una África víctima del Neocolonialismo.
OTAN NO, bases fuera.
Gastos militares para gastos sociales, escuelas y hospitales.
Andalucía es Tierra de Paz, pero no de la Pax imperial.
Justicia para África, el Sahara y Palestina.